lunes, 24 de agosto de 2020

La montaña rusa


               El segundo piso de la Autopista del Este de Caracas fue repavimentado hace como treinta años, y desde esa vez no se ha vuelto a tocar. Podemos observar un buen comportamiento de ese pavimento, pero podemos observar también que las juntas de construcción entre paño y paño quedaron desamparadas. Eso no solamente lo vemos, sino que lo sufrimos cuando circulamos por allí, y lo sufrimos varias veces seguidas, pues cada vez que el automóvil pasa por encima de una junta, entra y sale de una "batea", ocasionando un trabajo contínuo a los resortes y amortiguadores de nuestros carros durante un largo trecho, con los consecuentes daños y la inmerecida incomodidad para el conductor y todos los pasajeros.

               Es penoso que la principal arteria vial de nuestra ciudad capital haya permanecido tantos años con ese defecto, el cual fue ocasionado por una ligereza, al no considerarse que, cuando se hace una repavimentación en puentes y viaductos, un aspecto muy delicado e importante son las juntas, y en este caso no fueron consideradas para nada. Se hizo la repavimentación pero a las juntas no las levantaron, es decir, se les dejó el mismo nivel que tenían cuando fueron construídas. Esta situación anormal, incómoda y dañina, la ha soportado por décadas todo el que pasa por allí gracias a que solamente se puso una nueva capa asfáltica y obviaron algo vital, esencial, a considerar en toda pavimentación de esas características, como lo son las juntas de construcción.

               El llamado es a las autoridades que manejan estos mantenimientos, a no dejarnos en manos de unos trabajos mediocres para un sistema vial de la categoría de la Autopista Francisco Fajardo. Hay que abocarse a eliminar esos vergonzosos efectos de montaña rusa. Hay que levantar esas juntas y así convertir a la autopista en algo idóneo, decente, digno de una hermosa y valiente ciudad como lo es nuestra ciudad capital, lo cual agradeceremos enormemente las miles de personas que con frecuencia circulamos por allí.